El 26 de enero de 2018, Flybondi realizó su primer vuelo comercial, uniendo Córdoba con Iguazú. En tres años la aerolínea logró que el 20% de sus pasajeros, más de 540.000 personas, hayan volado por primera vez en avión.
Tras estar 9 meses sin volar por la prohibición de la actividad aérea regular por la Cuarentena, Flybondi retomó operaciones desde Ezeiza y volvió a conectar a 12 destinos del país, mientras que los vuelos internacionales darán comienzo a mediados de 2021.
» No tenemos grandes anuncios para hacer, tenemos lo mejor que podemos tener en este contexto: un equipo con muchas ganas de volver a crecer, accionistas que nos siguen apoyando y pasajeros eligiéndonos.»
Mauricio Sana, CEO de Flybondi.
En su primer mes de operación, Flybondi obtuvo un 85% de ocupación promedio y 83% de puntualidad. En esta etapa de primeros vuelos en temporada turística, los destinos más elegidos fueron Bariloche, Jujuy, Salta y Trelew.
Según estadísticas de la Unión Europea, por cada millón de pasajeros transportados se generan 3.000 empleos indirectos. La Low-Cost hoy brinda empleo en forma directa a 533 personas, y calcula que ya ha desarrollado más de 8.000 empleos indirectos.
Para qué sirven las líneas Low-Cost
En el mes de agosto de 2020, Flybondi mandó a realizar una encuesta nacional para conocer y entender la relación de la sociedad con el sector low cost:
- Conectividad: El 92% piensa que permite que las provincias estén más conectadas.
- Inclusión: 9 de cada 10 personas cree que las aerolíneas low cost le dan la posibilidad de volar a personas que antes no podían viajar en avión.
- Turismo: El 87% cree que ayuda a desarrollar el turismo de las provincias.
- Desarrollo económico: El 84% considera que mejora la actividad económica de las ciudades. y un 86% que permiten que las personas que ya viajaban en avión, lo hagan con mayor regularidad.
