Mitre Sarmiento

UGOFE se hará cargo del tren Sarmiento y Mitre

En 2005 cuando el gobierno de Néstor Kirchner le quita la concesión del Tren San Martín a la empresa Metropolitana, que encabezaba el empresario Sergio Taselli, se crea la Unidad de Gestión Operativa Ferroviaria de Emergencia (UGOFE) para hacerse cargo del servicio. En 2007, el nuevo operador que es en realidad la unión transitoria de empresas concesionarias de los servicios ferroviarios, toma por cuenta y orden del Estado Nacional la administración de las otras dos líneas que que tenía concesionado  Metropolitana, el tren Roca y el tren Belgrano Sur. Hasta aquí el único «malo de los trenes» fue Taselli, a pesar de que continúa vinculado al sector con talleres que fabrican formaciones para el Tren Roca, por ejemplo, o repara los techos de la estación de Constitución.
La tragedia de tren Sarmiento en Once puso en el tapete las malas condiciones en las que se prestaba el servicio y la falta de control por parte del Estado. Luego de 3 meses, el gobierno de Cristina Kirchner decidió quitar la concesión a TBA, no sólo de la línea Sarmiento, sino también de los tres ramales del Tren Mitre, y pasar la responsabilidad de operaciones de ambas líneas a la UGOFE. 
Pero deberá haber cambios en UGOFE, porque la misma está integrada por la saliente TBA, junto a Metrovías (concersionaria del Tren Urquiza) y Ferrovías (concesionaria del Tren Belgrano Norte), que ahora serán las únicas operadoras de las siete líneas ferroviarias que ingresan a la Capital (y el subte). Hasta hoy existía un Directorio integrado por un representante de cada una de la tres empresas ferroviarias y dos Comités Gerenciales (con un gerente por cada empresa) porque se opera y administra en forma separada la línea Roca de las líneas Belgrano Sur y San Martín. Las áreas de finanzas (que debe administrar los millonarios subsidios) y material rodante (mantenimiento de las formaciones) estaban compartidas y el área de operaciones estaba dividida por línea con personal técnico provenientes de las distintas empresas. Así, por ejemplo, el gerente de operaciones del tren Roca había llegado desde TBA, sin embargo su puesto es pagado por la UGOFE (o sea el Estado). Queda claro que va haber cambios, con un directorio reducido, con la caída de algunos puestos gerenciales, pero los puestos técnicos no serían afectados por la conformación societaria de la nueva UGOFE. 
No suena tan fuerte como en 2005 la palabra «estatización», porque se está dando vitualmente, también existe una mayor concentración de las empresas sobrevivientes de las privatizaciones menemistas. El sistema ferroviario ha quedado claramente vestusto y precisa una inversión gigantesca, que sólo puede salir por parte del Estado y sobretodo, creo yo, un cambio conceptual enorme: es preciso entender que el tren debe dejar de ser el transporte del pobre, para convertirse en una solución de movilidad para todos. Y no lo digo como eslogan, sino que debe tentarse al tipo que viene desde los miles de countries y barrios cerrados de Pilar, Maschwitz, Moreno o el Sur a abandonar los viajes en solitario por las congestionadas autopistas y subirse a un tren cómodo y que cumpla horarios.