Un total de cinco formaciones fueron afectadas por los incidentes que se desataron en Ciudadela, Liniers, Ramos Mejía y Haedo. Hay 14 vagones quemados por el fuego de activistas (me niego a creer que un tipo que se levanta a las 6 de la mañana y sale realmente a laburar se ponga a prender el único medio de transporte que, mal que mal, lo lleva del oeste al centro por dos guitas y mucho más rápido que cualquier colectivo).
Según indicaron desde TBA, concesionarios también del tren Mitre, si bien esta línea comparte modelo de vagones con la atacada, no quieren trasladar material rodante para no afectar otros servicios. El plan, según indicó Gustavo Gago, vocero de TBA, es acondicionar los vagones que se salvaron del fuego y rearmar por lo menos 3 formaciones. El Sarmiento contaba en total con 24 trenes, de los que 22 se ponían en vía, quedando uno siempre de alistamiento en talleres y un segundo como reserva. Ahora se espera que con el ingreso de un nuevo coche doble piso (con un 40% más de capacidad de pasaje), que podría incorporarse el jueves o viernes, pueda restablecerse un servicio con frecuencias de 12 minutos entre tren y tren.
¿Cómo funcionará el Sarmiento post incendio?
Esta tarde un colega que en 2005 estuvo en los incidentes de la estación Haedo, me recordaba las palabras del jefe de bomberos: «un incendio así no lo inicia cualquiera con un encendedor».